Un equipo motivado es un equipo productivo, feliz y comprometido. ¿No te parecen suficientes motivos para empezar a motivar a tu equipo? Y, ¡ojo! no solo se trata de subir el sueldo. Lee, lee.
- Reconocimiento
Este es uno de los puntos más importantes. Tus trabajadores necesitan que se les reconozca el trabajo y el esfuerzo. Tal vez el resultado no sea el esperado, pero hay que saber decir gracias y animar a que continúen en la misma línea.
- Objetivos claros y medibles
Establece unos objetivos específicos. De esta forma, el trabajador sabrá exactamente cuáles son sus tareas. También es importante decirle qué esperas de él/ella porque así evitas malos entendidos y promueves un buen ambiente de trabajo.
- Escúchales
Dedícales un tiempo a escucharles. Invítales a un café y que te hablen de sus inquietudes, qué les preocupa y qué esperan de la empresa. Atiende sus propuestas y, en la medida de lo posible, aplícalas.
- Autonomía
Cuando das cierta libertad y autonomía a tus trabajadores, les estás diciendo que confías en ellos. Así se establecen relaciones estables y duraderas. Además, promueves la autosuficiencia y que cada uno se responsabilicen de su trabajo.
- Políticas flexibles y de conciliación
Importantísimo favorecer entornos flexibles en cuanto a horarios y teletrabajo.
- Crecimiento personal y profesional
Apoya y promueve la formación continua. No solo estarás premiando a tus trabajadores, sino que también estarás consiguiendo un equipo más cualificado.
- Espacio cómodo
Crea un espacio de trabajo bonito, que invite a estar a gusto. Un lugar agradable, cómodo y atractivo.
- Actividades y celebraciones
Plantea actividades fuera de la empresa. El conocido como teambuilding, permite establecer nuevas relaciones, salir un poco de la rutina y vivir nuevas experiencias. Igualmente, es muy importante celebrar: cumpleaños, nacimientos, logros de la empresa, etc. Celebrar es un momento ideal para compartir y estrechar vínculos.
En definitiva, es muy importante tratar a tu equipo como una parte fundamental de la empresa. Por ello es imprescindible: cuidar, agradecer, premiar, escuchar y acompañar.